Lunes Santo (C) 2013

Evangelio según S. Juan, 12, 1-11

Seis dias antes de la Pascua, Jesús fue a Betania, donde vivía Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Allí le ofrecieron una cena; Marta servía, y Lázaro estaba con él a la mesa. María tomó una libra de perfume de nardo, auténtico y costoso, le ungió los pies y se los secó con su cabellera. Y la casa se llenó de la fragancia del perfume.


Judas Iscariote, el que lo iba a entregar, dice: -¿Por qué no se vende este perfume por trescientos denarios para dárselos a los pobres?. No le importaban los pobres, sino que era un ladrón. Jesús dijo: -"Déjala, lo tenía guardado para el día de mi sepultura; porque a los pobres los tenéis siempre con vosotros, pero a mí no me tenéis siempre". Muchos judíos se enteraron de que estaba allí y fueron por Jesús, y también para ver a Lázaro, al que había resucitado de entre los muertos. Los sumos sacerdotes decidieron matar tambien a Lázaro, porque muchos judíos, por su causa, se les iban y creían en Jesús.